Carta de Eddy Sánchez |
Publicamos la contestación
del responsable de Área Interna de Izquierda Unida comunidad de Madrid, Carlos Gutiérrez,
a la carta que le ha enviado Eddy Sánchez (ver la imagen). En su calidad de tal
responsable del Área Interna, informa a este último de que, como coordinador
general de IUCM, carece de facultades para modificar las funciones de los
miembros de la Comisión Ejecutiva y le clarifica aspectos sustanciales de la forma en que se
han llevado a cabo las últimas decisiones importantes en Ia organización
política.
Estimado
compañero, tal y como habíamos acordado esperaba nuestro encuentro para hoy mismo. En su lugar, ocupado sin duda, me haces enviar
esta nota. No puedo dejar de responderte (más
allá del comentario que te remití
por whatsapp sobre que deberías habérmelo hecho llegar con “el motorista de El Pardo”).
Primero
lo formal, pero a lo que todos y todas, tú el primero, deberíamos
estar obligados: los estatutos de IUCM
no recogen ninguna suerte de
“despido” ni “cese” como el que me
planteas en tus breves líneas. La figura
del coordinador general de nuestra organización es muy, muy importante pero tiene en el artículo 14 censadas sus
competencias. Como podrías haber
visto (o alguien por ti) no figura la prerrogativa de “prescindir” de ningún otro miembro de la dirección.
Ni cesarle en sus responsabilidades.
El 18
de febrero del pasado año, la Presidencia de IUCM eligió, a propuesta tuya, la Comisión Ejecutiva. En la propuesta votada por el
órgano (ver acta de acuerdos y
documentación aprobada) figuran las competencias de todos y cada uno de los componentes de la Comisión
Ejecutiva. Como puedes comprobar,
en mi caso señala explícitamente “Área Interna“. Entendiendo quieras modificar esto –mi responsabilidad- te indico que el único camino es que
el órgano que me nombro me cese.
No hay otro. Espero por tanto, y hasta tanto eso sucede, entiendas que no pueda dar validez alguna
a tu nota salvo que expresa tu
intención. Espero sinceramente que no me resulte necesario acudir
a ninguna otra vía para imponer lo que los
estatutos recogen con claridad. Más
allá de esta comunicación de respuesta.
Pero,
dejando lo orgánico-estatutario aparte, quiero ahora manifestarte mi sorpresa por la falta de argumento ni razón alguna que sustente tu
“decisión”.
Dos son los motivos que, primero el pasado viernes en nuestra
entrevista y luego ayer lunes telefónicamente y
por whatsapp, me transmites. Tal
vez, sin terminar de decidirte entre uno u otro has preferido que no
figurase ninguno en tu correo de “agradecimiento
de los servicios prestados”.
El
viernes alegaste mi posición en el proceso de elección de la lista para las elecciones europeas. En concreto, mi defensa de Paloma Lopez
como integrante de la misma
-numero 2- . Como ya tuve ocasión de recordarte en la reunión de la Comisión Ejecutiva, esa fue la
postura inicial de la mayoría (el
bloque) de la dirección de IUCM que solo “abandonamos” a propuesta tuya cuando nos comunicaste que, a solicitud
de la misma y con tu acuerdo,
habías trasladado a Cayo la gestión para “cerrar” su presencia en segundo lugar en la lista electoral.
La divergencia real aparece cuando
se pretende nos desdigamos y se coloca la opción de la compañera Paloma como un obstáculo para la “autentica”
opción, la compañera Lidia
Fernández, y se actúa, sin que se decida en ningún sitio conocido,
en consonancia con ese objetivo. No quiero
perder el tiempo en esto pues ya señalamos
las mañas desplegadas. Si en cambio, recordarte que 14 de los 17 miembros posibles del Consejo Político Federal,
adscritos a la mayoría política de
IUCM, avalaron la lista.
El otro
motivo de mi “cese”, que me planteabas ayer, era mi voto en contra de la nota de prensa que, travestida de resolución, se presentó
en la reunión de la Comisión
Ejecutiva del pasado viernes. Esto es todavía más “impactante”. Primero, porque no es la primera vez que
me manifiesto en el órgano en
posición contraria a propuestas diversas (recuerda la intervención
en Rivas o mi nota desautorizando el “referéndum” de San Fernando o sobre
la carta financiera y su aplicación….). Cierto
que hasta ahora habíamos terminado
coincidiendo, lo que no sucedió en esta ocasión. Pero, ¿de verdad
crees que votar en contra de una propuesta que
avale el coordinador excluye a
alguien, aunque se trate del responsable de Área Interna, de la dirección?.
No puedes hablar en serio. ¿Crees que ese
criterio seria defendible públicamente?.
Porque
una reunión de ejecutiva que viene acompañada de la filtración previa (otra vez) a los medios de aquello que se va a debatir en la
misma y, para más cachondeo, se
traslada como ya decidido; cuando se había rodeado del mayor secretismo por parte de los “conjurados/as”
para evitar su conocimiento por el
resto de los componentes de la Ejecutiva hasta el momento de iniciar la reunión (usare este caso en mis
memorias para dar una nota de
humor), no parece algo muy respetable en si mismo. Pero tú ahora legitimas estas prácticas y nos pides a otros
que hagamos lo mismo. No es posible.
Termino,
la cuestión de las europeas ha puesto de relieve que dentro de la dirección regional y del bloque que la sustenta existen diferentes
formas de entender la federalidad. Para mí, la
defensa de la política de IUCM y sus competencias no pasa por hacer de
la confrontación permanente con la
dirección federal, aunque se elijan los momentos como en este caso, el
elemento aglutinante de IUCM. Hoy estamos, sin
duda, más débiles. La gestión de
la lista de las europeas ha sido un descalabro. Sinceramente, deberías buscar por otro lado.
Como
siempre, recibe un abrazo.
Carlos Gutiérrez
No hay comentarios:
Publicar un comentario